Cuando nos convertimos en padres la vida cambia
totalmente. La llegada del nuevo bebé viene con una maleta cargada de emociones
pero también de incertidumbres en su crianza y desarrollo. ¿Quién nos pude
ayudar a absolver todas nuestras dudas en la maternidad? La respuesta es
sencilla, un buen pediatra.
Como papás buscamos soluciones a muchas de las
interrogantes que rondan nuestra
cabeza, y encontrar al médico indicado puede
llegar a ser todo un reto para nosotros, depositar la salud de nuestros
pequeños en su Doctor es casi un acto de Fe. Es aquí donde radica la
importancia de esclarecer preguntas en el momento de la consulta con el
pediatra.
¿Qué esperamos del Pediatra?
· Empatía. La
conexión entre el Doctor y el paciente debe ser uno de los puntos más
importantes; el niño no debe verlo como un enemigo, sino como amigo.
· Fácil de Localizar.
En casos de preguntas no absueltas o emergencias pueda ofrecernos soluciones
rápidas.
· Ten en cuenta su disponibilidad. Un buen pediatra debe estar dispuesto a resolver
inquietudes durante la consulta, y examinar al bebé minuciosamente, de lo
contrario, no estas con el correcto.
· Debe hacer preguntas.
El pediatra tiene que informarse de cómo va el desarrollo del niño, así sentirás
más confianza en él.
· Prevenir
antes que curar. Si acudes a una cita, el Doctor debe prestarle seguimiento
a la historia del niño, así anticipar enfermedades.
· Un buen ambiente. Es
recomendable que el consultorio sea limpio e higiénico.
Recuerda
que el pediatra, no solo es el Doctor de tus hijos, sino también un miembro más
de nuestra familia.
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